Por Susana Meza Serrano
El Internet y el comercio en los tiempos del Covid
Siempre han existido las barreras generacionales, pero algo que ha logrado unir a los Baby boomers con la Generación Z, pasando por los Millennials y la Generación X, es sin duda el “Internet”, palabra que podemos entender como algo más allá de la abreviación de “interconnected network”, debido a que es un concepto a nivel mundial de redes de comunicación interconectadas, que nos ha permitido continuar activos, cercanos, informados, pero sobre todo haciendo negocios alrededor del mundo, a pesar del confinamiento derivado de la terrible pandemia provocada por el SARS-CoV-2, que entre otras cosas ha redefinido y modificado profundamente la historia comercial del siglo XXI.
Dentro de pocos meses, conoceremos la magnitud del impacto global que el COVID-19 ha provocado en las economías del planeta este año, pero las plataformas digitales y las ventas en línea han sido las herramientas que impulsan al comercio y la visión de la sociedad moderna. Se calcula que en México las compras por internet se han cuadruplicado en lo que va del año, los rubros con mayor crecimiento durante el primer semestre han sido los artículos de cómputo aplicativos al trabajo y las clases a distancia, cabe mencionar a los artículos para limpieza, productos farmacéuticos, abarrotes, cosméticos/cuidado personal, productos digitales (entretenimiento) y servicios de comida.
Lo anterior ha significado una aceleración en el uso y posicionamiento del comercio electrónico en tierras aztecas; el cual se esperaba hasta dentro de dos años, ya que la distancia sanitaria obligó a todas las generaciones desde los abuelos hasta los nietos acercarse al internet y buscar alternativas vía electrónica para cubrir sus necesidades. “Latin America Ecommerce 2020”, estimó que durante este año 2.2 millones de mexicanos compraron algo en línea por primera vez, haciendo con ello de México, el 1º país de América Latina en crecimiento de ventas sobre comercio electrónico y el 6º a nivel mundial.
Este precipitado crecimiento ha planteado desafíos a las empresas de todos tamaños que ya contaban con un sitio web antes de la pandemia, debido a que en forma acelerada han tenido que desarrollar estrategias obedeciendo no solo las medidas sanitarias para la salud de sus empleados; sino respondiendo a los retos logísticos para buscar alternativas de abastecimiento y convivencia con cadenas productivas inestables, que en ciertos momentos pueden vulnerar la entrega de los pedidos en tiempo y forma.
La oportunidad empresarial de sumarse a la ola del comercio electrónico continúa, pero la construcción de una potente bancarización digital, así como una eficiente seguridad informática son temas pendientes hacia una evolución del e-commerce, ya que, junto a la bonanza de las ventas en línea, encontramos desgraciadamente un creciente número de fraudes virtuales. De acuerdo con expertos en ciberseguridad, México es el noveno país más afectado por el crimen cibernético, siendo el 71% motivado por la obtención de dinero y el 29% al espionaje, cabe recordar que en el T-MEC, el Tratado de Libre Comercio entre México, Estados
Unidos y Canadá, se encuentra un capítulo dedicado al comercio digital, lo cual no solo hace a este tratado vanguardista, sino que promueve acciones para el fortalecimiento de un marco jurídico enfocado en la protección de datos y actividades comerciales realizadas en el ciberespacio.
México tiene un largo camino que recorrer en la adopción de habilidades digitales, que le permitan no solo alcanzar a sus socios de América del Norte, sino que le falta tener una armonización legislativa global y eficiente que cumpla tanto con los principios básicos suscritos en el Capítulo 19 del T-MEC, como ante las necesidades que surgen del imparable crecimiento y utilidad del comercio digital a nivel mundial.
El 2021, será un año en que las estructuras comerciales internacionales replantearán su rumbo de adaptación para salir de la crisis económica actual en la cual está inmerso el mundo, asimismo la aparición de medicamentos y vacunas seguras y eficaces que permitirán restablecer el progreso de las naciones y sus sociedades, buscando con ello la mejor solución para la continuidad comercial, donde internet seguirá siendo pieza angular para la restructura de la vida empresarial en el mundo post-covid.